¡Escándalo en Jujuy! ¿Qué secretos esconden Gastón Morales y Javier Gronda en la Corte Suprema? ¡No te lo pierdas!

El clima político en Jujuy se encuentra en un punto crítico. A medida que se acercan las nuevas asunciones en la Legislatura Provincial, comenzaron a circular rumores sobre las designaciones para cubrir tres vacantes en la Suprema Corte de Justicia. Los nombres que están en el centro de esta contienda son Javier Gronda, Gastón Morales y Facundo Figueroa Caballero, quienes podrían ser propuestos por el oficialismo radical.

Con la mayoría de los votos asegurada hasta diciembre, el radicalismo busca acelerar los pliegos para estos cargos vitales del Estado. La intención del Ejecutivo es que estos nombramientos sean aprobados sin cuestionamientos, manteniendo así el status quo entre el oficialismo y el peronismo empresarial, a quienes podría responder Gastón Morales, hijo del ex gobernador y ex director de Cannava.

La situación de la Corte Suprema ha sido preocupante desde su ampliación en 2015, donde se pasó de 5 a 9 miembros. Esta decisión ha sido criticada en múltiples ocasiones, especialmente por los escándalos en los que han estado involucrados algunos jueces, quienes se han manifestado abiertamente a favor del ex gobernador Gerardo Morales. Durante su gestión, la Corte también enfrentó numerosos pedidos de juicio político, lo que pone en duda su independencia y su relación con el Ejecutivo.

Las vacantes que se deben cubrir son consecuencia de tres eventos trágicos: la muerte de José Manuel del Campo en 2024, la jubilación de Silvia Bernal a principios de este año y el fallecimiento de Sergio Jenefes en septiembre. La elección de sus sucesores tiene implicaciones significativas para el sistema judicial provincial.

Empezando por Gastón Morales, su perfil es controvertido. Como hijo del ex gobernador, su historial incluye un paso por Cannava, una empresa estatal que ha sido criticada por falta de transparencia. Además, fue convencional constituyente en la reforma de 2023, la cual fue aprobada sin consenso ciudadano, un hecho que generó descontento en la población. En las elecciones del 26 de octubre, este descontento se reflejó en una significativa pérdida de votos para el radicalismo, que ya había visto un declive desde 2015 y que se quedó sin representación en el Senado de la Nación en 2023.

El segundo candidato, Javier Gronda, tiene un perfil más bajo pero también está vinculado a controversias. Trabajó en la Fiscalía de Estado y está implicado en un conflicto territorial con la comunidad Tusca Pacha, donde se promovió el desalojo, un asunto que también involucra al actual diputado nacional electo de La Libertad Avanza, Alfredo Gonzales.

Por último, Facundo Figueroa Caballero cuenta con una larga trayectoria en la política provincial. Anteriormente fue concejal y funcionario del gobierno de Eduardo Fellner, y actualmente ocupa un cargo como diputado provincial, aunque su mandato se encuentra por concluir. Su carrera ha estado marcada por sus conexiones con el Partido Justicialista y su rol como apoderado de “ADVOCATUS S.A.S.”, una firma dedicada a la prestación de servicios jurídicos.

Es importante destacar que de los tres candidatos propuestos, dos son radicales y uno es peronista, lo que refleja la continuidad del bipartidismo en los altos cargos de la justicia jujeña. Sin embargo, la Red de Mujeres Políticas ha señalado la falta de paridad en el Poder Judicial, advirtiendo que con la posible aprobación de estos pliegos, de los 9 integrantes de la Corte Suprema provincial, solo dos serían mujeres: Laura Nilda Lamas y María Eugenia Nieto.

El futuro de esta designación no solo marcará el rumbo del Poder Judicial en Jujuy, sino que también tendrá repercusiones en el clima político provincial y en la percepción pública sobre la independencia del sistema judicial. En un contexto donde los vínculos entre el poder judicial y el ejecutivo están bajo el escrutinio público, el desafío será garantizar una justicia que realmente sirva a la ciudadanía, en lugar de a intereses partidarios.