¡Urgente! Sanidad revela un plan SECRETO para eliminar la gestión privada en hospitales: ¿podría salvar vidas?

En una revelación exclusiva para EL PAÍS, la ministra de Sanidad, Mónica García, ha anunciado que su departamento presentará a principios de año una normativa destinada a evitar el “ánimo de lucro” de las empresas que gestionan hospitales públicos en España. Esta medida surge en un contexto de creciente preocupación por la calidad de atención en el sistema sanitario, especialmente tras recientes revelaciones sobre prácticas cuestionables en la gestión pública.

El debate se intensificó esta semana cuando se dio a conocer un caso de malas prácticas en el Hospital de Torrejón, un centro público gestionado por una empresa privada. Según la información revelada, el consejero delegado de la empresa pidió en una reunión que se rechazaran pacientes con el objetivo de maximizar las ganancias. Este tipo de instrucciones no solo se verbalizó, sino que también fue documentado por correo electrónico, en el que se indicaba que “NO SE DEBEN INCLUIR PACIENTES NO CÁPITA” en diálisis peritoneal, refiriéndose a aquellos pacientes que no corresponden al área sanitaria que cubre el hospital y que, por ende, no son rentables.

La intención del Ministerio de Sanidad es clara: prevenir que situaciones como la del Hospital de Torrejón se repitan. Este modelo de gestión se instauró hace 30 años por el Partido Popular (PP) en diversas comunidades, particularmente en Madrid y la Comunidad Valenciana, donde se establece que la administración pública paga un canon fijo a las empresas por la gestión de un hospital, sin importar la actividad que realicen. Esto implica que cada euro que no se destina a la atención de pacientes representa una ganancia adicional para la empresa encargada de la gestión.

La propuesta de la ministra García se inserta en un contexto más amplio de debate sobre la privatización y gestión de los servicios públicos en España. El aumento de los escándalos relacionados con la sanidad ha llevado a muchos a cuestionar la eficacia y la moralidad del modelo actual. La presión para asegurar que la atención médica se centre en el bienestar del paciente, y no en la rentabilidad, es más urgente que nunca.

El anuncio de esta norma refleja un compromiso del gobierno de abordar estos dilemas éticos y de gestión en el sistema sanitario. Sin embargo, la implementación efectiva de estas medidas será clave para su éxito. Los ciudadanos argentinos, al igual que sus contrapartes en España, tienen un interés palpable en la calidad y accesibilidad de la atención médica, así como en la transparencia de la gestión pública.

En definitiva, la iniciativa del Ministerio de Sanidad no solo busca corregir una práctica dañina en la gestión de hospitales, sino que también plantea un desafío mayor: replantear la relación entre el sector público y privado en un área tan crítica como la salud. Mantener la atención centrada en el paciente y no en la rentabilidad debe ser un objetivo primordial para cualquier sistema sanitario.

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