Cristina Kirchner desata la polémica: ¡Bullrich responde con un golpe bajo que todos temen!

La polarización política en Argentina se agudiza a medida que las figuras más prominentes del escenario nacional se lanzan acusaciones mutuas sobre el estado actual de la economía. Patricia Bullrich, exministra de Seguridad y actual candidata a la presidencia, ha arremetido contra el gobierno de Javier Milei, afirmando que se encuentra en un proceso de reparación del "desastre" dejado por la administración anterior. En su publicación en redes sociales, Bullrich recordó que en diciembre de 2023, la inflación mensual alcanzó un alarmante 25%, una cifra comparable a la inflación acumulada de todo 2025.
La exministra no solo se detiene en las cifras, sino que también denuncia el contexto en el que se encuentran los ciudadanos argentinos: "con precios congelados, dólar artificial, 27 tipos de cambio, faltantes de nafta, electrodomésticos carísimos, pobreza y desempleo". Este retrato sombrío de la economía busca conectar la memoria de los votantes con el impacto tangible de las políticas pasadas.
En respuesta a las críticas que ha recibido, Bullrich se muestra desafiante y señala que, en tan solo dos años, su gestión logró "romper ese esquema empobrecedor", sugiriendo que el actual gobierno siente temor ante el "rumbo correcto" que está tomando su partido. Además, hace un guiño irónico al presidente Javier Milei, sugiriendo que debería dedicar tiempo a estudiar economía, tal vez con la ayuda de algunos libros recomendados.
Por otro lado, Cristina Fernández de Kirchner, exmandataria y actual líder del Frente de Todos, no ha tardado en responder a los recientes datos de inflación que indican un aumento del 2,5% en noviembre, con un acumulado del 27,9% en los primeros once meses de 2025. En un comentario publicado en Twitter, recordó que el "IPC Congreso" había marcado un 2,4% en noviembre de 2015, al final de su propio gobierno, lo que lleva a cuestionar la efectividad de las políticas actuales del gobierno de Milei.
Fernández de Kirchner enfatiza que el aumento de la inflación actual se produce en un contexto de "ajuste" sin precedentes que afecta salarios, jubilaciones y la obra pública. También menciona un nuevo préstamo del FMI por 20 mil millones de dólares, lo que proyecta una imagen de un gobierno que no solo enfrenta dificultades internas, sino que también depende de financiamiento externo en un momento de crisis. Con un telón de fondo de "consumo en caída libre y el cierre de fábricas y comercios", la exmandataria se pregunta retóricamente si realmente todo "marchará de acuerdo al plan".
Este intercambio de acusaciones y cifras refleja no solo la tensión política en el país, sino también la preocupación generalizada de la población ante la inestabilidad económica. Las palabras de los líderes políticos evocan sentimientos encontrados entre los ciudadanos, que enfrentan una realidad compleja y desafiante. En este contexto, la economía argentina sigue siendo un tema candente, donde cada cifra se convierte en un arma política que ambos lados utilizan para respaldar sus posturas.
Con la llegada de las elecciones, es probable que estas tensiones se intensifiquen. La comunicación política se convierte en un campo de batalla donde cada palabra y cifra cuentan. Los votantes deben navegar por este mar de información y desinformación para tomar decisiones informadas en un clima de incertidumbre financiera.
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