¡Descubrí el oscuro secreto detrás del sello cordobés! ¿Por qué sigue siendo un campo de batalla?

Por Carolina Biedermann

Este jueves, la Justicia Electoral falló a favor de Oscar Agost Carreño, otorgándole la razón en la segunda intervención del PRO Córdoba. Sin embargo, la situación del partido es compleja, ya que actualmente enfrenta una tercera intervención, y desde el PRO nacional aseguran que se han agotado las vías de diálogo.

Los conflictos entre decisiones políticas y respuestas legales en el PRO de Córdoba se han intensificado, creando lo que parece ser un laberinto sin salida. La disputa entre Agost Carreño y Mauricio Macri por el control del sello cordobés continúa y se vuelve cada vez más tensa.

La reciente decisión judicial le otorga la razón a Agost Carreño, quien, tras haber conseguido una cautelar en el juzgado de Servini de Cubría, obtuvo un fallo que declara nula la segunda intervención. No obstante, el partido encara una tercera intervención que también ha sido llevada a la Justicia Electoral, quedando a la espera de resolución en ambas partes.

Desde el entorno de Agost Carreño, se manifiesta que aún no han accedido al acta de intervención y sostienen que la medida del partido nacional es parte de una estrategia para evitar que se realicen elecciones en Córdoba. “Los órganos partidarios aprobaron que haya internas entre febrero y marzo, pero no hemos podido llamar a elecciones porque aguardábamos la resolución de la Justicia. Sin embargo, cuando finalmente aprobamos las elecciones, nos intervinieron de nuevo”, expresaron.

Por su parte, desde el PRO Nacional dejaron en claro que “cada vez que la justicia falle a favor de Oscar, Macri lo volverá a intervenir”. Según ellos, aunque el terreno judicial pueda estar a favor del diputado, ya se ha decidido que el partido será intervenido tantas veces como sea necesario. Además, indicaron que no habrá diálogo, ya que consideran a Agost Carreño un jugador que actúa en contra del partido.

Los intercambios de acusaciones han sido constantes. Agost Carreño afirmó que en Córdoba lo echaron a él, pero que a Gisela Scaglia, vicegobernadora de Santa Fe, quien presidirá el bloque de Provincias Unidad, no se le tomó la misma medida. También mencionó que Diego Santilli fue felicitado por su decisión de unirse a La Libertad Avanza.

Con los puentes dinamitados y el trasfondo político convertido en un litigio permanente, el PRO cordobés se prepara para enfrentar los próximos meses bajo un doble mando: el de los jueces y el de las intervenciones. En este contexto, hablar de una normalización parece, por ahora, un simple deseo.