¡Escándalo en la AFA! ¿Lavado de dinero? Las pruebas que podrían cambiarlo TODO en el fútbol argentino.

La AFA ha confirmado la celebración de la Recopa de Campeones para el año 2026, un anuncio que coincide con el aumento de la atención hacia la transparencia y la integridad dentro del fútbol argentino. Sin embargo, no es el único tema que está acaparando titulares. Recientemente, una denuncia presentada por miembros de la Coalición Cívica ha destapado una serie de acusaciones alarmantes acerca de la gestión financiera en la AFA, que involucra presuntos movimientos de lavado de dinero y una red de testaferros que, según se indica, han acumulado bienes de lujo que no concuerdan con sus declaraciones fiscales.

El dirigente Matías Yofe ha sido uno de los principales voceros de estas acusaciones, describiendo un escenario donde los controles estatales han fallado, permitiendo la creación de un circuito de maniobras financieras que requiere respuestas más rápidas de la justicia. Durante una entrevista en Radio Rivadavia, Yofe expresó su desconfianza hacia el sistema judicial, afirmando que "es el sistema judicial totalmente a sed de de esta gente". Su comentario resalta una preocupación creciente sobre la efectividad de las investigaciones que involucran a figuras importantes dentro del fútbol argentino.

Entre las acusaciones más llamativas se menciona una “suntuosa mansión” con helipuerto ubicada en Pilar, que se atribuye a los propietarios de la empresa Real Central. Según el denunciante, en esta propiedad se encontrarían “más de 120 autos de colección”, que incluyen marcas de alta gama como Ferrari, Porsche y BMW. Para Yofe y otros dirigentes que impulsan el expediente, estos bienes representarían movimientos financieros que no han sido detectados por los controles administrativos que deberían haber actuado de manera inmediata.

Un punto crucial que Yofe enfatizó fue la falta de medidas cautelares tras la presentación del caso, argumentando que “se iban pasando peleándose por cuestiones de competencia entre colegas y no marcaban ninguna medida preliminar para cuidar lo que había en el interior de la quinta”. Esta afirmación pone de manifiesto una serie de fallas en el sistema judicial que podrían poner en riesgo la integridad de la investigación y la recuperación de activos que se presume adquiridos de manera ilícita.

La denuncia también menciona a Luciano Pantano, quien figura como monotributista, y a su madre jubilada, ambos responsables de Real Central. Esta empresa, además de la mansión en Pilar, tendría otra propiedad en el barrio Aires Plaza, lo que añade más inquietudes sobre el origen de los fondos que se estarían utilizando para adquirir estos bienes.

Yofe no se detuvo allí, sino que además vinculó esta situación patrimonial con fondos que deberían haber sido destinados a las instituciones deportivas, indicando que “de confirmarse esto, tristemente es la plata que no estaría llegando a los clubes”. Este comentario subraya el importante deterioro financiero que atraviesan muchas entidades deportivas en el país, creando un contraste entre los recursos en cuestión y la difícil situación económica de los clubes argentinos.

Otro aspecto preocupante planteado por la Coalición Cívica es la ausencia de alertas fiscales ante compras millonarias. Yofe concluyó que “no saltó ninguna de las alertas” y utilizó un ejemplo cotidiano para ilustrar su punto: “Cualquiera de nosotros mañana quiere comprar un auto y no te da y no te da el blanco… te va a llamar el Estado y te va a decir de dónde salió”. Este tipo de inacción en la detección de irregularidades refuerza las sospechas sobre el origen de los fondos involucrados.

Finalmente, Yofe advirtió sobre el posible conflicto de interés que rodea al Tribunal de Disciplina de la AFA, que está integrado por jueces y fiscales en actividad. Planteó que causas relacionadas con la dirigencia deportiva podrían caer en manos de miembros de ese mismo tribunal, sugiriendo que los intereses pueden estar entrelazados. Cuando se le preguntó directamente sobre si una investigación contra Claudio “Chiqui” Tapia podría terminar en manos de un miembro de ese tribunal, Yofe no dudó en resumir su respuesta con un “sí, claro. Es impresionante. Ese es el delirio”.

La situación descrita no solo exige respuestas rápidas por parte de la justicia, sino que también pone de manifiesto la necesidad de establecer mecanismos de control más rigurosos en el ámbito deportivo, donde la transparencia y la legitimidad son fundamentales no solo para el fútbol argentino, sino para todas las instituciones que dependen de estos recursos.