¡La verdad oculta detrás del colapso de Bitcoin en 2025: ¿perderás tu inversión? Descubre los secretos!

El 3 de enero se cumplirán 17 años desde que Satoshi Nakamoto, el seudónimo del fundador o fundadores de Bitcoin, presentó por primera vez la idea de las criptomonedas. Desde entonces, Bitcoin ha logrado consolidarse en el orden financiero global más rápido que cualquier otro activo. En los últimos años, la industria de las criptomonedas ha dejado de ser un objeto de burla para el sistema financiero tradicional, y ha comenzado a ser aceptada e incluso promovida por diversas instituciones. Banques e inversores institucionales están lanzando sus propios productos relacionados con criptomonedas, y las monedas estables han conseguido un marco regulatorio favorable en Estados Unidos. En octubre de 2023, el valor de mercado de Bitcoin alcanzó un máximo astronómico de 2.5 billones de dólares.
Sin embargo, esos logros ahora presentan un nuevo desafío para las criptomonedas. Los precios han comenzado a caer drásticamente: desde un máximo histórico de aproximadamente 126.000 USD a principios de octubre, el valor de cada Bitcoin actualmente ronda los 90.000 USD. Para un activo especulativo, que no genera ingresos y depende únicamente de la expectativa de futuras ganancias, la falta de un nuevo relato optimista que justifique un repunte en el precio es un problema considerable. A medida que la aceptación de las criptomonedas se ha expandido, también lo han hecho sus vínculos con otros mercados, lo que implica que las repercusiones de esta caída se sentirán mucho más allá de la esfera de las criptomonedas.
En 2020 y 2021, las políticas de confinamiento y la generosidad fiscal de diversos gobiernos se combinaron con un aumento en la oferta de trading de criptomonedas. A finales de 2023, surgió la expectativa de que pronto se lanzarían fondos cotizados en bolsa (ETFs) de criptomonedas. De hecho, en enero de 2024, la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos aprobó las primeras solicitudes de ETF. Adicionalmente, la victoria electoral de Donald Trump en noviembre de 2022 fue un impulso significativo para Bitcoin.
No obstante, hoy en día, los inversores no tienen problemas para acceder a Bitcoins. En muchas partes del mundo, cualquier persona con un celular puede acceder a una amplia gama de criptoactivos. Recientemente, el Banco Central de la República Checa adquirió una canasta de Bitcoins y otras criptomonedas por un millón de dólares. Sin embargo, esta compra es insignificante en comparación con los 171.000 millones de dólares que posee el banco checo en reservas, y la mayoría de los bancos centrales aún no consideran incluir activos digitales en sus reservas.
El otro precio que han pagado las criptomonedas por su victoria es que el impacto de su caída tendrá repercusiones más amplias que en el pasado. Los inversores más expuestos a la reciente caída son aquellos que actuaron como si el boom nunca fuera a terminar. Un ejemplo es Strategy, la empresa de software de Michael Saylor, que ahora enfrenta una situación delicada al haber financiado su acumulación de Bitcoins con préstamos, alcanzando un valor de aproximadamente 60.000 millones de dólares. Por primera vez en dos años, la capitalización bursátil de Strategy está por debajo del valor de sus tenencias de Bitcoins, aumentando el riesgo de una venta forzada de sus reservas cripto.
El mayor riesgo es que la falta de nuevo entusiasmo por las criptomonedas se contagie a otros mercados. Desde 2020, Bitcoin ha mostrado menos volatilidad que en el pasado, pero también se ha visto más correlacionado con el rendimiento de las acciones tecnológicas. A medida que la tenencia de Bitcoins se ha expandido más allá de sus fieles seguidores, los conflictos entre diferentes clases de activos se han intensificado. El índice de acciones tecnológicas NASDAQ 100 está experimentando caídas moderadas que podrían considerarse una liquidación, y es crucial monitorear su evolución.
Es posible que Bitcoin haya agotado los catalizadores evidentes que podrían provocar nuevos aumentos en su precio, desde la mayor facilidad para invertir hasta un marco más sólido de seguridad jurídica. Sin embargo, aún hay esperanzas de que la reserva estratégica de Bitcoin creada por Trump en marzo pueda ofrecer algún tipo de soporte. Desde entonces, esa reserva ha funcionado como un vehículo para los Bitcoins obtenidos a través de incautaciones policiales. Algunos legisladores, como la senadora republicana pro criptomonedas Cynthia Lummis, han expresado su apoyo a la compra de más Bitcoins en el mercado abierto. Si el precio continúa en descenso, sus defensores podrían considerarlo una oportunidad para adquirir más. Aunque la posibilidad de intervención del gobierno de Trump parece remota, siempre puede haber sorpresas en el ámbito político y financiero.
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