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Horacio Gallegos, el recientemente electo vocal por jubiladas y jubilados en la OSEF, ha comenzado a abordar una serie de problemáticas urgentes que enfrenta la obra social, entre las cuales destacan la revisión de convenios, la gestión de fondos y la inclusión de afiliados en los padrones.
En un diálogo con el programa radial “Desde las Bases” de Radio Provincia, Gallegos explicó que su elección no fue un proceso planificado, sino que surgió de la necesidad de actuar ante una realidad que, según él, ha sido denunciada desde hace tiempo por su compañera Elvia Agüero. “La idea era acompañar y hacer un proyecto para modificar las leyes que enmarcan nuestra obra social”, afirmó, refiriéndose a la ley 1071 y a la 1062 del FUCO, donde se gestionan los fondos de la OSEF.
Gallegos detalló que una de las primeras tareas que se han planteado es la revisión de todos los convenios actuales, destacando que uno de ellos, que debería haberse firmado con el mayor prestador de servicios, aún no se ha concretado a pesar de que ya se está implementando. También mencionó un convenio relacionado con Córdoba que, a su juicio, dejó mucho que desear: “Salieron corriendo como los bomberos a apagar un incendio, y ahora está llamando media Córdoba”, sintetizó, señalando que algunos beneficiarios han quedado desatendidos, especialmente aquellos con necesidades de salud de alto costo.
Una de las inquietudes más notables que expresó Gallegos fue la situación de afiliados que no aparecen en los padrones. “Hay un padrón de 880 personas, cuando en realidad rondan las 1200 o 1300”, explicó. Esto ha generado confusión y frustración entre los afiliados, quienes se preguntan por qué no pueden acceder a la obra social. “Les dicen que se metan por internet y no pueden entrar, porque no les han dado de alta a muchos”, agregó, enfatizando la necesidad de revisar este aspecto urgentemente.
Sobre la gestión de fondos, Gallegos mencionó una ley reciente destinada a recaudar dinero para la OSEF, que supuestamente provendría de excedentes del puerto para los años 2024 y 2025. Sin embargo, expresó su preocupación porque parte de esos fondos fueron prestados al gobierno, lo que genera incertidumbre sobre la verdadera solvencia financiera de la obra social. “El prestador ya empezó a presionar porque quiere cobrar, con todo su derecho, pero no sabemos cómo se va a resolver esto”, se lamentó.
La falta de una política sanitaria pública es otro de los puntos críticos que Gallegos subrayó en su intervención. “Uno puede dirigir una obra social, pero la salud pública la tiene que manejar la provincia”, alertó, haciendo hincapié en que la OSEF puede contribuir, pero no puede resolver el problema estructural de la salud en la región. “Hemos hablado con médicos y ellos también plantean esta falta de política”, concluyó.
El desafío que enfrenta Horacio Gallegos es significativo. Con una obra social que atraviesa problemas de gestión y una comunidad que demanda respuestas urgentes, su rol será crucial para el futuro de la OSEF, no solo en la revisión de convenios y la inclusión de afiliados, sino también en el posicionamiento de la salud pública como una prioridad para el gobierno provincial.
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