¡Shock en Jujuy! El hijo de Morales deja Cannava con deudas millonarias y ¡8 empresas listas para privatizar! ¿Qué pasará ahora?

Las sospechas se confirmaron: Gastón Morales, el hijo del ex gobernador Gerardo Morales, dejó la dirección de Cannava Avatara SE, la empresa estatal jujeña dedicada a la producción de derivados de cannabis para fines científicos y medicinales. Su salida oficial de la compañía se produjo esta semana, junto con planes para su venta a compañías del exterior.

“Cierro mi ciclo al frente de esta empresa estatal después de 7 años. Dejo la empresa hoy con una evaluación real de mercado que casi triplica lo invertido por la provincia a lo largo de estos 7 años”, declaró Morales durante una conferencia de prensa, donde también presentó un balance de su gestión.

Cannabis Avatãra Sociedad del Estado fue creada en 2018 bajo la ley provincial 6.088 y comenzó sus operaciones en 2019. A pesar de que la información en su página web ha cambiado en los últimos tiempos, una investigación realizada por Bichos de Campo en 2023 señala que la empresa comenzó a inscribirse en diversos organismos para producir productos de grado farmacéutico, lo que implicó varios desembolsos de dinero por parte de la provincia de Jujuy.

Recientemente, el 1 de octubre, se publicó un decreto en el Boletín Oficial jujeño (n° 2302/2024) que oficializaba un nuevo traspaso de recursos provinciales a Cannava por un monto de 2.610 millones de pesos en concepto de “aportes de capital”. Curiosamente, la firma del gobernador Carlos Sadir databa del 16 de diciembre de 2024.

Cannava, la fábrica de cannabis medicinal que maneja el hijo del ex gobernador Morales, sigue recibiendo transferencias millonarias del gobierno de Jujuy y se multiplican las dudas sobre su actividad.

A lo largo de su existencia, la transparencia y legalidad de Cannava han sido cuestionadas, especialmente en relación con el destino de estos aportes provinciales y los convenios firmados con empresas extranjeras. Un caso notable es el de la empresa norteamericana Green Leaf, subsidiaria del grupo Player’s Network, que después de anunciar su inversión con Cannava se vio obligada a declarar la quiebra.

A pesar de que Morales ha afirmado tener todas las rendiciones de cuentas en orden y de que la información se encuentra disponible en la página oficial, la realidad parece ser más compleja. Según Jujuy Dice, en la Auditoría General de la Provincia, el ejercicio 2022 está en trámite, el de 2023 se presentó recientemente, y el de 2024 no ha sido presentado y figura como vencido.

En la conferencia, Morales destacó la valoración de la empresa, estimada en 98 millones de dólares, y su consolidación en exportaciones y comercialización. La empresa, según él, se ha convertido en un activo estratégico en el sector.

El “Modelo Jujuy” para el cannabis ofrece más dudas que certezas: comenzó siendo un proyecto con privados y terminó acaparado por una estatal bancada con recursos públicos.

Morales hizo hincapié en los contratos “firmes y vigentes por 5 años” con empresas de países como Alemania, Brasil, Australia y Portugal, y afirmó que las exportaciones de la empresa aumentaron un 1.700% en los últimos tres años. Se prevé que el total acumulado de exportaciones al cierre de la campaña 2025 será de 300 millones de pesos, con proyecciones para 2026 que rondan entre 8.000 millones y 15.000 millones de pesos, dependiendo de las inversiones que se realicen.

Sin embargo, lo más relevante es el futuro de Cannava. Según Morales, ya hay ocho compañías internacionales interesadas en la empresa, principalmente del sector farmacéutico y biotecnológico. De estas, tres han presentado cartas de intención formales para invertir en el paquete accionario de la empresa estatal.

“Este interés demuestra el reconocimiento del valor generado, tanto en infraestructura productiva como en certificaciones y cumplimiento normativo”, explicó Morales, subrayando que todo está integrado “100% en suelo jujeño”.

Es importante mencionar que este año, la legislatura de Jujuy sancionó la ley 6.468, que otorga facultades al Poder Ejecutivo para privatizar o vender sociedades del Estado, aunque aún no se ha presentado un listado de empresas afectadas, entre ellas Cannava SE.

Marcelo Guastella, quien asumirá como nuevo director de Cannava, confirmó su intención de continuar con las operaciones y de cumplir con los compromisos asumidos por la firma. “Somos una empresa farmacéutica con compromisos asumidos y esa va a ser nuestra principal responsabilidad”, afirmó Guastella.

La transición en Cannava, junto con los cuestionamientos sobre su gestión y el futuro incierto de la empresa, abre un debate crucial sobre el uso de los recursos públicos y la transparencia en la administración estatal en Argentina.