¿Villaverde a un paso de la caída? El Gobierno perdido en una batalla clave que podría cambiarlo todo. ¡No te lo pierdas!

En un giro inesperado que ha sacudido la política argentina, el Gobierno ha admitido que la asunción como senadora de la rionegrina Lorena Villaverde se presenta cada vez más incierta. Villaverde, electa por Libertad Avanza, enfrenta serias acusaciones, incluyendo sus supuestos vínculos con Fred Machado, un deportado por narcotráfico, y una detención en los Estados Unidos hace dos décadas, cuando intentaba ingresar con un kilo de cocaína.

La situación se complicó la semana pasada cuando Villaverde no pudo jurar su cargo, a diferencia de los 23 senadores electos que sí lo hicieron. Esta decisión fue impulsada por el propio bloque libertario, que solicitó que su diploma fuera enviado nuevamente a la comisión de Asuntos Constitucionales del Senado para un análisis más detallado. Previamente, este diploma ya había recibido un dictamen de rechazo debido a la oposición de legisladores de UxP y de figuras como el radical Pablo Blanco, la larretista Guadalupe Tagliaferri, y el peronista disidente Juan Carlos Romero.

Esta estrategia de enviar su diploma a comisión parece ser un intento de ganar tiempo, dado que desde el oficialismo se reconoció que, si su pliego hubiera sido tratado en el recinto, habrían sufrido una derrota significativa. La situación sigue siendo complicada para el bloque libertario, que ha indicado que “a lo sumo podemos tener 28 votos, no más”. Esto implica que la oposición al ingreso de Villaverde es mucho más fuerte de lo que se pensaba.

Desde La Libertad Avanza, se confía en que podrían conseguir el apoyo de los dos senadores alineados con el misionero Carlos Rovira, un senador alineado con el gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, y posiblemente de dos senadores de Santa Cruz. Sin embargo, aunque hubo gestos de apoyo del PRO y la UCR, en la práctica no se han concretado compromisos firmes.

Un legislador del bloque mileísta expresó: “No queremos establecer el antecedente de que por mayoría simple se impide la asunción de un senador”, y añadió que sería “un desastre” para el oficialismo caer derrotado en la votación sobre la banca de Villaverde. Este contexto se torna aún más preocupante debido a que la comisión de Asuntos Constitucionales, que debía tratar el diploma de Villaverde esta semana, no ha sido convocada, ni siquiera por el oficialismo.

Villaverde, actual diputada nacional, había presentado su renuncia para poder asumir como senadora, pero de acuerdo con fuentes consultadas, en las últimas horas ha decidido retirar dicho pedido. Este miércoles está convocada una sesión especial en la Cámara baja para tratar las renuncias presentadas por los legisladores. En caso de que su renuncia sea aceptada, Villaverde se quedaría sin la banca y sin fueros, en el desafortunado escenario de que nunca pueda asumir como senadora.

Fuentes oficiales han confirmado a Clarín que entre la mesa política del Gobierno, que incluye a Karina Milei, Manuel Adorni y Patricia Bullrich, y la bancada de LLA del Senado se discute la situación de Villaverde. Se han trazado planes, pero es urgente que se tomen decisiones antes de la próxima sesión del Senado. “No puede quedar en el freezer lo de Villaverde. Necesitamos que el bloque esté completo”, señalaron. Si Villaverde no asume, será reemplazada por el también libertario Enzo Fullone.

La política argentina sigue moviéndose en un clima de incerteza, y el futuro de Villaverde es un claro reflejo de las tensiones existentes dentro del legislativo. Mientras tanto, la ciudadanía observa atentamente, ya que estos desarrollos pueden tener profundas implicaciones en el panorama político del país.